Pensé que estas cosas ya no existían, cada vez q nos fijamos en algo que antes veíamos a diario pues ahora nos damos cuenta que ahora eso ya a desaparecido.
Son las 7:49 p.m. camino por el parque de Conocoto (No me pregunten que hago aquí pues la respuesta a eso es: Me trajo el destino). Al principio dude si era buena idea atravesar el lugar pero la pileta y una mujer que jugaba con su hija en la parte central, me dieron la confianza de4 sentirme segura haciéndolo.
A medida que ingresaba descubrí entre luces tenues mezcladas por los arboles a parejas, una pareja por banca, besándose, riendo, acostadas mirando al cielo.
Dentro del parque de Conocoto no ha pasado el tiempo... Me siento en una de las pocas bancas que quedan libres una X junto a una N dentro de un corazón me arrancan una sonrisa, Imagino a los dueños de aquellas iniciales, Ximena y Nelson??? o tal vez Xavier y Natalia.... mmmmm.... aunq ahora quien quita que sea Nelson y Xavier o Ximena y Natalia.
Hay lugares como este que no cambian, mi mente mal pensada e insegura temiendo siempre lo peor y creyendo todo con un morbo que la sociedad perdona, ella si cambia.
Cada vez c hace más tarde, me voy quedando sola incluso la patrulla de policía en la esquina se a ido y ahora q lo analizo capaz y no es tan buen lugar como yo ando suponiendo. Las sombras empiezan a jugar con mi mente, un vallenato suena desde la tienda de cd´s piratas y las parejas se juntan más como sintiendo la canción con las almas amarradas.
Yo sigo aquí esperando, ya ni recuerdo q esperaba.. aaahhhh siiii!!!! Llegaron por mí, me voy.